Para María, nombre ficticio, casada y con un hijo mejor de edad, el año ha comenzado con la notificación de la Administración Autonómica en la que le informan que le han renovado el Ingreso Aragonés de Inserción por un año, hasta el 30 de noviembre de 2015, lo que le permitirá respirar un poco más tranquila y, con esfuerzo, hacer frente a los gastos mínimos y básicos de su familia.

Durante los últimos meses, la familia de María ha vivido con los 424 euros que su marido ingresaba en concepto de Renta Activa de Inserción (RAI), una ayuda para parados de larga duración, mayores de 45 años.

En septiembre del pasado año, María acudió al Justicia de Aragón para exponer que llevaba cinco meses esperando la renovación del IAI y su situación era ya insostenible. Tras pedir información al Departamento de Sanidad, Bienestar Social y Familia de la DGA, la Institución emitió una sugerencia pidiendo a la Administración que resolviera la solicitud de Maria a la mayor brevedad dadas las circunstancias de urgente necesidad. La Administración ha acepado la sugerencia.